¿Qué es el 4L Trophy?
El 4L Trophy es un rally automovilístico -dirigido principalmente a estudiantes en Francia, pero que ahora despierta interés en toda Europa- con un doble objetivo: ganar la competición, por supuesto, pero también trabajar por un fin humanitario.
Organizado cada año desde 1997, une Francia y Marruecos, atravesando el implacable desierto del Sahara, y ha ido a más, reuniendo a casi 600 equipos de dos aventureros, de edades comprendidas entre los 18 y los 28 años. Según los organizadores, en cada edición participan unos 1.000 coches (y algunos camiones) y, como decíamos antes, aunque hay una clasificación a la llegada -que premia al equipo que ha recorrido menos kilómetros-, el objetivo es también, y aún más importante, llevar material escolar y juguetes a los niños desfavorecidos de Marruecos.
Como era de esperar, los únicos coches autorizados a participar en el rally son los Renault 4L, un modelo emblemático de los años sesenta y setenta. Las carreteras -o más bien la falta de carreteras a través del desierto- son especialmente difíciles para este evento, al igual que las condiciones meteorológicas, por lo que se trata de una auténtica aventura para los participantes. Por otro lado, sin duda vivirán una experiencia inolvidable, no sólo durante los vivacs, sino también a través de enriquecedores encuentros con la población local.
Una carrera bien aceitada
Percibido como un viaje iniciático por muchos de los participantes, el 4L Trophy representa también un desafío logístico considerable. La principal preocupación es garantizar la seguridad de los pilotos y copilotos, y todos sabemos que en la inmensidad del desierto, la amenaza para la salud es muy real en caso de avería que se prolongue un poco más de la cuenta, o incluso en caso de perderse lejos de las pistas.
En la práctica, cada 4L está equipado con una baliza de geolocalización que permite detectar rápidamente a una tripulación completamente «fuera de carrera» y, por supuesto, se dispone de un número de asistencia que establece un enlace directo con el «Race HQ». El «Race HQ» cuenta también con un equipo de 85 mecánicos, una decena de médicos de urgencias, sin olvidar a los bomberos, un equipo de la Cruz Roja y un helicóptero para sobrevolar el desierto.
El hecho de que los organizadores puedan echar la vista atrás a tres décadas de expediciones por el desierto es sin duda un voto de confianza para los participantes… ¡pero también, hay que decirlo, para sus padres y patrocinadores! Y ya que hablamos de patrocinio, el paso al siguiente punto es obvio…
Présentación del equipo patrocinado por EFI Automotive Service
Para EFI Automotive Service, patrocinar este evento fue una elección obvia, porque no es un «simple» rally automovilístico y transmite valores que apreciamos. La carrera reúne a personas en torno a una pasión compartida, el automóvil, al tiempo que les permite contribuir a una noble causa. Además, es una aventura increíble, con multitud de retos que superar, lo que en última instancia refuerza los lazos entre los participantes. No olvidemos, por supuesto, que gracias al 4L Trophy, cada año unos 20.000 niños necesitados se benefician de material escolar, deportivo y juguetes, gracias a la colaboración con una quincena de asociaciones locales, como «Les enfants du désert», para las que también se recaudan fondos antes de la aventura.
Para esta edición 2023, EFI Automotive Service se enorgullece de patrocinar a la tripulación de Baptiste CHARVET y Nicolas ARNAL, que cursan el segundo año de ingeniería en la Centrale Lyon ENSE. Su motivación ya es evidente, pues no han dudado en crear su propia asociación, la 4L’ERIE, con el fin de recaudar los fondos necesarios para la inscripción, la compra y la preparación del vehículo, sin olvidar la adquisición de los suministros y alimentos que desean donar a los niños marroquíes.
Lea sus testimonios a continuación para saber más sobre por qué decidieron embarcarse en esta apasionante aventura:
Nicolas ARNAL, 19 años.
Su historia: «Siempre me han apasionado los deportes de motor y los rallies. Cuando empecé a trabajar en ENISE, hace casi dos años, oí hablar del 4L Trophy y enseguida quise participar. El hecho de poder conocer y ayudar a personas necesitadas me atrae aún más».
Baptiste CHARVET, 19 años.
En sus propias palabras: «Soy un apasionado de los coches desde que era niño, así que cuando me enteré de que nuestra escuela tenía una asociación del Trofeo 4L, aproveché la oportunidad. La pasión por los coches, el descubrimiento de nuevos paisajes y la dimensión humanitaria son lo que más me atrajo de este raid».
Ahora les deseamos mucho éxito, y les aseguramos nuestro apoyo en su carrera: ¡depende de ustedes, señores, hacer rugir el motor de su 4L hasta la meta!
Fuente: www.4ltrophy.com
